¿Se han preguntado porqué no puedo oler mi propia fragancia? O han mencionado la típica frase ¡No me fija!

Si es así, lee con atención lo siguiente: 

“Nuestro sentido del olfato es increíblemente eficiente. Su capacidad para detectar e identificar lo que olemos ocurre (en la mayoría de los casos) de manera bastante subliminal.

Es por eso que verá a alguien arrugar la nariz antes de decir "¿Qué es ese olor?" Un equipo de procesamiento tan potente y eficiente también tiene que comportarse con ingenio ... por esta razón sufrimos fatiga por olores.

Incluso cuando todavía estamos oliendo algo, es posible que no lo estemos registrando o identificando tanto como lo hicimos en el primer contacto.

Es la misma razón por la que no identificamos el olor único de nuestra propia casa a menos que hayamos estado de vacaciones, o fuera de ella durante varias horas. Entonces, si bien su cerebro no necesariamente retroalimenta a su mente con la información de que está usando fragancia, puede estar seguro de que otros disfrutarán lo que lleve puesto.

Un consejo para superar la fatiga por olores es tener variedad de fragancias: alterne fragancias día a día o para diferentes ocasiones (día o noche), con la finalidad de que sus receptores olfativos permanezcan siempre alerta.”

Fuente: Fragances of the world.